viernes, 1 de abril de 2011

Mandarina

Te vi llegar con el sol; con el sol y tus colores, y no habría dinero para pagar este olor a dulzura con el que duermo cada noche; aunque tu no lo sabes. Pero si un día andas por aquí, si te parece que también huele a día de verano, no lo dudes o nunca será.

Descubramos juntos esa gran estrella. Aunque no sepamos porqué, aunque no sepamos porqué. Dime un secreto, sin decir "lo siento", yo no cuestionaré nada de lo que me digas y, a cambio, bajaré el cielo y alcanzaremos esa gran estrella. No importa que la ciencia diga que no es posible, resultará relativamente fácil. Te acompañaré hacia esa estrella.

"Mandarina, mandarina; vivo reflejo de un sueño" ¿Qué haces cuando no estás aquí? Ni todas mis mentiras juntas podrían crear un agujero negro para tapar este sol. ¿Quieres venir? dudo que llueva, por lo menos hoy.  Saldremos a pasear, subiremos montañas, yo seré el hombre de la guitarra y tocaré para ti. Y cuando deje de sonar la música, justo antes de que empecemos a sentirnos solos, nos desprenderemos de la piel y reinará el sonido de esta pulpa desnuda; sin verdes hojas que nos tapen, sin necesidad de decidir, sin que pare jamás el sonido. Solamente una sonrisa. Quizás sería algo bonito.




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